El recorrido para vivir esta experiencia mágica, empieza desde Manizales, Caldas, se toma la vía a Bogotá, se desvía en el sector La Esperanza, posteriormente se pasa por el Estadero Kumanday.
La nieve no es el único atractivo del ecosistema de páramo en el Parque Nacional Natural de los Nevados, pues caminar hasta las cimas o crestas de sus montañas, observar las estrellas o escalar, son algunas de las múltiples actividades deportivas que se pueden realizar en santuario ambiental que abarca un área cercana a los 58 mil háctareas y en las que confluyen los departamentos de Caldas, Risaralda, Quindio y Tolima.
Experimentar el amanecer del cráter arenas, es una de esas experiencias que llenan el alma y la memoria de quienes recorren este encanto natural del Paisaje Cultural Cafetero Colombiano, que a comienzos del año se vio abrigado en sus lomos por una gruesa capa de nieve que estuvo ausente durante varios años a consecuencia de ese calentamiento global que sigue derritiendo drámaticamemte nuestros más bellos graciales.
El recorrido para vivir esta experiencia mágica, empieza desde Manizales, Caldas, se toma la vía a Bogotá, se desvía en el sector La Esperanza, posteriormente se pasa por el Estadero Kumanday, ideal para degustar un buen café y un pedazo de queso; antes de llegar al Cerro Gualí se encuentra la “Ojo de Indio”, una montaña poseedora de un un orificio provocado por la erosión glaciar hace miles de años. Este recorrido puede durar unas 3 horas, pasando de los 2.180 metros a los 3.900 metros sobre el nivel del mar.
- TENGA EN CUENTA
– El clima es frío
– Según la temporada puede haber lluvia o sol
– Es necesario un guía o conocedor, posibilidad de perderse por la espesa neblina.
– Utilizar bloqueador solar, ropa térmica cómoda.
– Evitar dejar basuras.